La hipertensión pulmonar es una enfermedad rara, con una prevalencia de alrededor del 1% de la población mundial, pudiendo llegar hasta el 10% en mayores de 65 años. Concretamente se trata de un tipo de presión arterial elevada que afecta a las arterias de los pulmones y al lado derecho del corazón.
Esta enfermedad provoca que las arteriolas y capilares pulmonares se estrechen, bloqueen y destruyan, dificultando de esta forma el flujo de sangre hacia los pulmones y ocasionando un incremento de la presión arterial en las arterias pulmonares. Este incremento de presión arterial origina un incremento en la presión del ventrículo derecho, pues este debe contraerse con mayor fuerza para bombear la sangre hacia los pulmones, provocando de esta manera que el músculo cardiaco se debilite y falle.
Algunos factores que incrementan la probabilidad de sufrirla son: tener sobrepeso, ser un adulto joven, consumir drogas como la cocaína o tener antecedentes familiares de dicha enfermedad.
TIPOS DE HIPERTENSIÓN PULMONAR
Atendiendo a la causa que origina la hipertensión pulmonar podemos diferenciar cinco tipos distintos.
Hipertensión arterial pulmonar idiopática: La causa que origina este tipo de hipertensión arterial es desconocida. Se cree que puede estar relacionada con la mutación de un gen específico, por lo que es hereditaria; con el consumo de determinados medicamentos o drogas ilegales como las metanfetaminas; la existencia de enfermedades cardíacas congénitas u otras enfermedades como lupus, cirrosis, infección por VIH…
Hipertensión pulmonar causada por enfermedad cardíaca del lado izquierdo: En este caso existe una enfermedad cardíaca de la válvula izquierda, como por ejemplo enfermedad de la válvula mitral o aórtica o insuficiencia del ventrículo izquierdo.
Hipertensión pulmonar causada por enfermedad pulmonar: La causa está relaciona con algún tipo de enfermedad pulmonar como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfisema, fibrosis pulmonar, apnea del sueño o exposición a largo plazo a elevadas altitudes, entre otras.
Hipertensión pulmonar causada por coágulos sanguíneos crónicos: Ocasionada por una embolia pulmonar.
Hipertensión pulmonar asociada a otras afecciones que tienen motivos poco claros de por qué se produce la hipertensión pulmonar: como por ejemplo: trastornos en la sangre, trastornos que afectan a varios órganos del cuerpo, trastornos metabólicos, tumores que presionan las arterias pulmonares, síndrome de Eisenmenger...